Esta conclusión se desprende de las declaraciones del secretario de Medio Ambiente y Desarrollo Rural del PSOE, Hugo Morán, ante un auditorio lleno de pequeños inversores del sector de la energía solar.
Anpier había convocado una jornada en Madrid, y es allí donde Morán, quien también es diputado socialista por Asturias, hizo estas declaraciones. En la jornada se debatía sobre la inseguridad jurídica que afecta al sector nacional de las energías renovables y sobre la desconfianza que genera esta inseguridad para los inversores internacionales.
Según lo que aseguraba Morán, el PSOE trabajará para restaurar el marco regulatorio al amparo del que miles de inversores arriesgaron su dinero para poner en funcionamiento pequeñas huertas solares, y que se vieron animados por una administración que prometía a través del BOE, unas rentabilidades muy concretas. Sin embargo, esas rentabilidades se revisaron a la baja ya desde el año 2010, y ahora son tan escasas que hacen que muchos de esos pequeños inversores estén en una situación crítica.
Según los datos en poder de Anpier, de los casi 30.000 millones de euros invertidos para poner en marcha los 4.500 megavatios fotovoltaicos que hay en España, 20.000 se le deben aún a la banca.
Morán empezó reconociendo los errores cometidos por el último Gobierno de Zapatero, que fue el que empezó a perjudicar al sector fotovoltaico minorando su rentabilidad, ya a finales de 2010.