238 megavatios de nueva potencia eólica en Grecia; 235 en Portugal; 38,2 en España. La Unión Europea añadió el año pasado a su parque eólico continental más de 12.000 megavatios de nueva potencia. De ellos, solo 38 fueron conectados en España. Alemania vuelve a ser, un año más, la locomotora del Viejo Continente, con 5.443 megas de nueva potencia eólica.
Esos son algunos de los datos que acaba de hacer públicos el último eurobarómetro eólico de la Unión Europea. El Viejo Continente alcanzó, a 31 de diciembre de 2016, una potencia eólica total acumulada de 153.600 megavatios. Un año antes, la Unión registraba (a finales de 2015) un global de 142.000 megavatios de potencia eólica, es decir, que el año pasado el Viejo Continente añadió a su parque eólico más de 12.000 megas de potencia nueva. Alemania, que volvió a ser la locomotora europea, añadió a su cuenta 5.443 megavatios. En segundo lugar se situó Francia, con 1.346; y, a continuación, Holanda, que sumó 788 megas y entra así en el Top 10 de la UE. Reino Unido y Polonia completan el quinteto de naciones que anduvieron en 2016 muy por delante del resto.
Mar adentro, frente a las costas del Viejo Continente fueron instalados en 2016 alrededor de 2.000 megavatios, mil menos que el año anterior. Reino Unido, Alemania y Holanda encabezaron el escalafón marino (a escala global, la eólica marina alcanzó a finales del año pasado los 14.200 megavatios). A pesar de que la UE sumó en 2016 a su parque eólico continental 12.068 nuevos megavatios, este año (2016) la producción de electricidad de origen eólico se ha incrementado en la UE28 tan solo en un 0,3% (desde los 301,9 teravatios hora generados en 2015 a los 302,6 teras de 2016). Ello fue debido, según EurObserv'ER, a las excepcionalmente malas condiciones meteorológicas.